La tarta Pavlova es, básicamente una fuente de merengue, un relleno de crema de nata y una decoración de fruta con su correspondiente salsa.
Partiendo de esta definición, las interpretaciones no tienen límites.
En esta ocasión he recreado un barco Vikingo o Ladia, que es el barco ruso de la misma época. Lo imaginé lleno de fruta exótica, con unas rodajas confitadas como escudos, unos remos de merengue y una vela de chocolate blanco.
Estoy bastante satisfecha con el resultado, aunque solo está en un ochenta por cientos de su diseño original. Pero me ha servido de aprendizaje y la próxima vez que haga esta tarta en forma de barco, el resultado será muy distinto.
Recordatorio:
Preparar las naranjas con antelación.
Usar rodajas pequeñas.
Hacer los remos con chocolate, no con merengue.
Hacer el mástil con chocolate, no con merengue.
Usar fruta de otros colores.
Usar una crema Chantillí más espesa, con queso o con chocolate blanco para que los escudos se peguen a la estructura.
La vela de chocolate blanco se vuelve blanda a temperatura ambiente. Usar este factor para darle la forma ligeramente curvada.
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